El werkén de Ranquilco, Rodrigo Curipán, dijo que este centro de residuos no puede funcionar en Collipulli, porque vulnera derechos ancestrales de su pueblo.
COLLIPULLI.- Una demanda en contra del Estado de Chile en la Corte Interamericana de Justicia, CIJ, presentaron cuatro comunidades mapuches de Collipulli, con el objetivo del impedir la entrada en funcionamiento del relleno sanitario de la Asociación de Municipalidades Malleco Norte, instalado en la ruta que une a esa comuna con Angol, el cual, según explicó el werkén de la comunidad de Ranquilco, Rodrigo Curipán, vulnera los derechos ancestrales de su pueblo.
“Hace casi dos meses que nosotros recurrimos a la Corte Interamericana de Justicia con el propósito de demandar al Estado de Chile, en vista de que se han vulnerado los derechos mapuches desde el punto de vista cultural y del buen vivir”, sostuvo el dirigente. La presentación fue patrocinada por la abogada Karina Riquelme.
FALLO
Curipán explicó que la presentación en la Corte Internacional la hicieron luego que la Tercera Sala de la Corte Suprema revocara el 17 de noviembre pasado la sentencia de la Corte de Apelaciones de Temuco, que ordenó paralizar la puesta en marcha del centro de acopio, tras acoger un recurso de protección interpuesto por comunidades mapuches en contra del proyecto, donde acusaron la contravención, por parte de las autoridades, del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), porque se vulneró el derecho de consulta y participación de los pueblos indígenas en el desarrollo de esta iniciativa.
Luego, este litigio escaló a la Corte de Suprema, a través de un recurso interpuesto por la Asociación de Municipalidades Malleco Norte y la empresa Consorcio Cosemar y William Ives S.A. a cargo del proyecto. Allí los ministros de la sala autorizaron el funcionamiento de dicho centro de manejo de residuos, fallo el cual fue calificado por Curipán como “político e inconstitucional”, debido a que el proyecto se elaboró sin el consentimiento de las comunidades.
VULNERACIÓN
El werkén señaló que este relleno no puede comenzar a funcionar y que debe desmantelarse, para devolver el territorio a las comunidades, las que lo han reivindicado desde el año 1935. Explicó que el relleno sanitario “es una abierta vulneración del derecho a la cosmovisión espiritual y cultural de los mapuches”.
Agregó que también se debe restaurar el ingreso al menoko (sitio sagrado, no sólo porque es un humedal, sino porque también alberga gran cantidad de hierbas medicinales), por la importancia que tiene para los mapuches, el cual ahora será contaminado si el relleno comienza a funcionar, afectando los canales sin nombre y Pichilolenco que llegan hasta el Río Malleco, lo cual también perturbará a los agricultores no mapuches de Santa Elena.
ANCESTRAL
Rodrigo Curipán dijo que para el Estado de Chile ese territorio es de Forestal Mininco, a la cual la Asociación de Municipios Malleco Norte compró las 50 hectáreas donde se construyó el relleno, pero que ancestralmente corresponde a Ranquilco. Dijo que son 14 comunidades afectadas directamente por este proyecto, por lo que cree que se sumarán más a la